Quise dejar morir a Constanza, clavarme en el rollo de la seguridad, dejar de fantasear y ser materialista… terminar con las historias que me antenian viva...dejar las caminatas por la U...dejar de esperar encontrar a la Constanza que me diera la inspiracion...
Para que yo Camila la niña que nunca dejo de creer en los cuentos de hadas, en las historias creadas en noches frías de soledad… tomara por fin un rumbo fijo. Un norte real donde mis sueños truncados no dolieran...
Quise morir bajo el manto de la frivolidad, pero las lecciones ajenas, los comentarios desconocidos, las sonrisas de mis recuerdos… que no me dejaban dormir, tampoco me dejaron morir…
Quizá si estoy muerta pero mis sueños, bajo la oscuridad siguen doliendo, sigo escuchando las notas musicales que perturban mi corazón -no puedo evitarlo- las luces, el sudor helado de la emoción, el ruido ensordecedor de los aplausos, no me dejan en paz…
Lo quise, tal vez aun lo quiero, no se si debo, pero me gustaría ocultarme, dejarme desaparecer… convertirme en esas luces que danzan al amanecer…
1 comment:
me alegra que constanza esté viva en las manos de camila...
Saludos,
C. Del Valle.
PD: .
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