Tuesday, November 14, 2006

Noche de luna III

Creo que debo una explicación, mi blog tenia una intención un motivo que perdí en el camino, justo como yo me perdí…no se porque me disculpo, quizá porque necesito pedir perdón al mundo para liberar mi culpa…

Al igual que aquella noche donde las lagrimas de una joven desconocida trajeron a mí, añejas sensaciones… Hoy cuatro meses después, mi vida da un vuelco y la necesidad de soñar vuelve a perturbar mis noches.

El sol era radiante, la calle de piedra roja se mezclaba con el más maravilloso paisaje que podas imaginar, montañas azules, pequeñas casitas con sus jardines multicolores y la tranquilidad de un olvidado lugar en el mes de enero era lo que rodeaba a aquella mujer.

Podías escuchar sus pasos apresurados y sentir la ternura de su rostro, una pequeña criatura de cabellos claros y cuerpecito menudo.

Mis sueños vacíos y sin sentido toman realidad, ¿será acaso que las murallas que construí, se agrietan con el tiempo? Seguro que mi descuido las ha dejado caer. Porque los sueños que no permitían mi descanso, vuelven a mi.

Sigues cuestionando mis lunas, sigues persiguiendo mis ilusiones. ¿Será acaso que tu fantasma me necesita?

El dolor marco como una ráfaga el rostro de aquella dulce mujer. Sus pasos ligeros se detuvieron de golpe. Su escuálida figura se retorció. Será acaso que las manecillas de esta historia estaban a punto de detenerse.

Como puedo remitirme a los hechos si tu historia no la conozco, desde aquel día que los prados verdes que pisabas se alejaron de los míos. Solo puedo delirar por las noches con tu sombrío recuerdo. ¿Qué quieres decirme? O quizás mi cordura juega a poner preguntas en mi mente que me obliga a pensar en lo que ya no existía para mí.

Debo tener más cuidado con las grietas o solo debería dejarlas hacer su trabajo, que fuguen esos vivos recuerdos que mantenía bajo prisión. Que me exigen a buscar bajo los escombros las respuestas que no quise, las lagrimas que no rodaron por tez, las estrellas que no brillaron más.

Debo tener mas cuidado, ya que como la historia me lo ha comprobado las murallas caen y los prisioneros vuelven a la luz.

Un frío y blanco lugar fue mi primera visión, un frió y pálido lugar es mi refugio…

Un frío y blanco lugar fue mi primera visión, una dulce caricia mi primera sensación…